Estimados Amigos Visitantes
El pasado día 13 de septiembre del año en curso he recibido con profunda satisfacción y porque no decirlo, con mucho orgullo, el nombramiento como Delegado de la Asociación Nacional Revolucionaria “General Leandro Valle” en la Delegación Iztacalco, misma delegación en donde actualmente vivo, y hablando precisamente de estos dos sentimientos, a continuación me permito explicarlos:
Satisfacción primero, porque mi trabajo de años como muralista y todo lo que he aprendido durante ellos; en los cuales he sentido y sufrido en carne propia la carencia de sensibilidad de muchas personas para apoyar el arte y la cultura, la falta de identidad nacional y las circunstancias que vive nuestra sociedad –experiencia a fin de cuentas–, me han llevado a ser considerado un digno representante de esta Asociación, de larga tradición y de intachable reputación.
Y orgullo, porque sé que formaré parte de una lucha social que cambiara el rumbo y el futuro de nuestro país, a decir, tengo absolutamente presente que nos será algo fácil de desarrollar pero tampoco imposible, mi experiencia a este respecto es mínima, pero como siempre, si no se sabe de algo, pues buscas asesores que te aconsejen, –enseñanza de mi mentor–, así que tendré buen cuidado de acercarme a las personas idóneas para tal efecto.
Agradezco a la Junta Directiva de la ANRGLV por haberme considerado apto para coadyuvar al logro de sus objetivos, y en especial a su Presidente el Coronel y Licenciado en Derecho Reveriano García Castrejón, al Vicepresidente General Div. DEM y Mtro. Arturo Olguín Hernández, al Secretario General Doctor M.C. Pedro Raviela Delgado, por la confianza en mí depositada, por mi parte habré de emplear en el desarrollo de mis actividades, mi más alto sentido de responsabilidad y calidad, siempre respetando y siguiendo los estatutos y principios de esta noble Institución y del Partido Revolucionario Institucional, llevando siempre en alto, en las buenas y en las malas, la bandera de nuestro partido, hasta colocarla nuevamente en la cúspide.
Reciban un cordial saludo
Jesús Cristóbal Flores Carmona
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